Clementina pidió un microcrédito en 2013 para comprar una vaca parida, tras ver los frutos conseguidos ha solicitado un segundo microcrédito para montar una empresa de alimentación (pulpería). Esta es su historia:
«Yo, Clementina Guevara Andrade, le doy gracias a Dios por las bendiciones obtenidas a través de los créditos que por medio de ADENOCH he recibido y gracias al apoyo económico que las personas representantes de Microwd nos han dado a todas las familias beneficiarias y protagonistas de los créditos.
Mi familia está compuesta por 8 hijos en total, 5 de ellos ya formalizaron un hogar aparte del mío. Me corresponde a mí, junto a mi esposo que realiza la actividad de albañilería, la responsabilidad de educar, crear y mantener a 3 niños menores.
Recibí un primer crédito de U$ 600 dólares de parte de Microwd por medio de ADENOCH, para la compra de una vaca parida, la cual me ha dado dos partos más en el período del 2013 al 2015 y esto me ha servido para fortalecer mi economía familiar.
Cancelé mi primer crédito y solicité un segundo crédito para el establecimiento de una pequeña pulpería que nos permita vender productos más accesibles para las familias que viven en el sector. No contábamos con una pulpería o pequeño negocio que nos permitiese la comercialización de los productos básicos para las familias,así, hemos reducido gastos y riesgos al traer nuestras necesidades alimenticias desde el municipio o de la ciudad.
Con las ganancias obtenidas he podido pagar mi primer cuota del crédito y he apoyado a mis hijos en sus estudios, además de los beneficios logrados en cuanto a beca de estudio y materiales necesarios para el estudio al menos de uno de mis hijos.»
Más mujeres, como Clementina, buscan financiación. ¿Inviertes?