La búsqueda del nuevo syn e istemi económico -

Puntos de partida

Según Rodríguez Ulloa (1985) la noción etimológica de SYN (con) e ISTEMI (coloco) puede traducirse como “reunir en un todo organizado.” En la teoría general de sistema (TGS) desarrollada por L. Von Bertalanffy en 1930; la cual se basa en una búsqueda de ley y orden del universo; esto quiere decir “conjunto de elementos relacionados.”

Desde hace décadas el escenario económico dibuja una estructura difícil de enmarcar. Sin rumbo, y sin modelo teórico aparente, deja entrever que el nuevo sistema debe ser definido bajo la integración de elementos hasta ahora fuera del desarrollo económico global. Todo sistema tiende a la entropía, al desorden, y por tanto el nuevo reto será redefinir esos elementos, innovar bajo las premisas de la “destrucción creativa” que impulsa el motor del desarrollo capitalista de Schumpeter:

”…para que haya avance y creación de nuevas combinaciones tiene que producirse al mismo tiempo una destrucción de las combinaciones anteriores.”

Las dificultades del nuevo modelo

INESTABILIDAD: Los desafíos del nuevo modelo son muchos y de elevada dificultad: recursos naturales, crecimiento demográfico, deterioro del medio ambiente, incremento de las desigualdades… En una sociedad “moderna líquida” (Zygmunt Bauman) parece complicado transformar y consolidar estructuras básicas que den impulso a un nuevo orden social y económico. Haciendo alusión a Bauman, “…en está sucesión de nuevos comienzos saber liberarse de las cosas prima sobre saber adquirirlas.” Por tanto, concretar y estabilizar un nuevo modelo es arduo y complejo en la vida líquida devoradora de objetos de consumo.

INTERCONECTIVIDAD: La economía global ha facilitado el progreso económico, pero también ha dejado patente la distancia entre las naciones pobres y ricas, tanto dentro como fuera del mismo territorio. Abordar el equilibrio conlleva replantearse las bases de las estructuras económico, o rescatar sus orígenes y dejar de centrarnos en exclusividad, y sin límites, a la consecución de la riqueza monetaria. Es decir, poner como eje central en la economía a las personas. Volver a las premisas aristotélicas de la eudaimonía: Bien vivir.

FUGACIDAD: La búsqueda del beneficio inmediato no es viable. Gestionar la velocidad con la que todo transcurre no es sostenible. Romper el círculo vicioso y reformular el comportamiento y la racionalidad económica son las puntas de lanza de los nuevos modelos que se postulan: la solidaridad y el egoísmo frente al utilitarismo.

La búsqueda

Conscientes de todo lo expuesto han aparecido en esta década nuevos modelos, alternativas y movimientos que pretenden dar solución a los problemas que plantea la economía global, y romper definitivamente con el círculo en el que estamos inmersos. Todas estas ideas innovadoras tratan de poner como centro de beneficio a la persona, a la comunidad, un nuevo modelo para el homo economicus. Algunos de estos modelos y alternativas son: