Adaptar MICROWD al día a día de la crisis sanitaria ha sido vital para poder seguir cumpliendo con nuestra misión. Aunque las medidas en los diferentes países en los que operamos han sido muy diferentes, gran parte de nuestro equipo y mujeres extraordinarias han tenido que tomar las mismas medidas que la mayoría: quedarse en casa hasta nuevo aviso.
Tanto en Perú, México y Nicaragua, hemos tenido que adaptar los procesos para poder seguir teniendo un relación estrecha con nuestras prestatarias y poder seguir ofreciendo un modelo por y para la comunidad.
Cambiamos las visitas presenciales por llamadas
Gracias a todos nuestros equipos, nuestros ojos y voz en terreno, hemos ido escuchando las diferentes realidades que viven y cambiando, por ejemplo, las visitas presenciales por llamadas continuas. No queremos perder la estrecha relación que hay entre las mujeres extraordinarias y los técnicos que dan seguimiento y apoyo a cada caso y situación.
Hemos sido capaces, gracias a ellos, de ofrecer la posibilidad a todas las mujeres extraordinarias de posponer el pago de sus préstamos sin ningún tipo de penalización. Nos han ayudado a identificar estos casos y han hablado con ellas para explicarles que no están solas en esta situación, que entre todos vamos a hacer lo posible para salir de esta crisis cuanto antes y mejor.
Identificamos los proyectos de alto impacto
Y no solo eso, también hemos identificado los proyectos de alto impacto: los negocios de abastecimiento, farmacias, ganadería… indispensables en momentos como el que estamos viviendo. Mujeres extraordinarias que entienden que su comunidad les necesita para poder seguir con el día a día mientras perdure la situación.
Estamos consiguiendo, poco a poco, tres objetivos indispensables gracias a nuestro equipo local: mantener MICROWD más vivo que nunca, dar ánimos y esperanza en toda la comunidad MICROWD y cuidarnos entre todos, tanto entre el equipo como con las mujeres extraordinarias.
AUTORA: Cristina Oraá [Finanzas].
