Desde MICROWD, tenemos la grandísima suerte de estar participando en el SOCIAL MBA, un programa emocionante que nos abre las puertas a convertirnos en mejores emprendedores sociales, mejores líderes y mejores seres humanos.
La importancia de los pequeños gestos
Durante esta primera semana hemos podido profundizar sobre la teoría del metro cuadrado. Básicamente, hemos visto la importancia de los pequeños gestos: no hace falta tener, para dar. Simplemente escuchando, o sonriendo, podemos tener un gran impacto en la gente que nos rodea.
Esta teoría nos invita a centrarnos en tomar acción en nuestro pequeño metro cuadrado. De esta forma podremos ir mejorando el entorno en el que vivimos y poco a poco, podremos expandir ese metro cuadrado para llegar cada vez a más personas y más lugares, convirtiendo ese pequeño metro en cientos de kilómetros cuadrados.
Esta teoría me hace pensar en la filosofía de MICROWD: como todo nuestro modelo gira en torno a apoyar a mujeres extraordinarias para que sean ellas quienes, a través de sus emprendimientos y su capacidad productiva, puedan mejorar su metro cuadrado.
Cuando una mujer nos pide 100€ para comprar unos cuantos productos y luego venderlos en su comunidad, está siendo valiente, asumiendo un compromiso con una entidad crediticia sin tener certeza sobre cómo le irá su negocio. Pero está claro que cuando las mujeres logran vender a un buen precio y sacan ganancias de su negocio, el impacto que generan en su metro cuadrado, es innegable: ellas lo invierten en la educación de sus hijos, en mejorar sus casas, en darles una vida un poquito mejor a quienes las rodean.
Con el pequeño gesto de solicitar un microcrédito, pueden llegar a generar un impacto que trasciende a toda su comunidad
Y así, poco a poco, van ampliando su impacto: con el segundo crédito, algunas logran contratar a las personas más vulnerables de su comunidad para que las apoyen, incentivando así la actividad económica de sus zonas. Logran hacer crecer sus negocios, amplían sus redes comerciales, y ganan en autoestima y confianza. Y así, con ese pequeño gesto de solicitar un microcrédito, pueden llegar a generar un impacto que trasciende a toda su comunidad.
Por Beatriz Tena [Operaciones en MICROWD].