Uno de los motivos que esgrimen gran parte de aquellos que no aportan donaciones dinerarias a una ONG es la falta de certeza de que su ayuda sea correctamente canalizada, llegando a aquellos que más lo necesitan. Cuando uno hace un donativo a una ONG, sea cual sea la misma, y siempre que no controle el destino real de esos fondos, está realizando un acto de fe con dicha organización. De hecho, lo normal es que una parte de los fondos donados vayan a las propias arcas de la organización, a fin de pagar partidas tales como: salarios, proveedores de material de oficina para sus servicios centrales, publicidad…
La mayor parte de las ONG mantienen planes de transparencia, a fin de dotar de certidumbre sobre sus acciones y el coste de las mismas, mediante memorias anuales de gastos e ingresos o a través de agentes externos (como la Fundación Lealtad) que acreditan el grado de transparencia mediante la entrega de sellos de calidad en función de la documentación acreditativa aportada. No obstante, todas estas herramientas sirven sin duda a los grandes inversores institucionales, dadas las grandes cifras que manejan, siendo muy difícil para el socio mensual (el que satisface una cuota de 10 o 15 euros al mes), tener constancia fehaciente del destino de su dinero.
“Para una ONG es complejo dar información a tiempo real”
Desde Microwd no queremos poner en duda la responsabilidad de las ONG en la gestión de los fondos donados. Nosotros mismos colaboramos con una ONG local en Nicaragua llamada ADENOCH que ha sido auditada recientemente (puedes consultar informe de auditoría realizado por KPMG aquí), así mismo mantenemos lazos muy estrechos con la ONG MAYAS. Por ello, sabemos de la complejidad para estas entidades de poder dar información a tiempo real y con exactitud del desarrollo económico de los proyectos que realizan. Debemos tener en cuenta que muchas de ellas trabajan en países con divisa distinta a la de la donación o donde no es fácil conseguir facturas.
“Los inversores de Microwd tienen la posibilidad de hablar con la mujer a la que han destinado la inversión”
¿En qué se diferencia por tanto a nivel de información sobre el destino, la ayuda que se canaliza a través de Microwd de la que se realiza a través de una ONG? En primer lugar, todos los inversores de Microwd tenéis la posibilidad de hablar con la mujer a la que hayáis destinado vuestra inversión. Esta charla la gestionamos desde Microwd a través de Skype, pudiendo de este modo conocer de primera mano en qué ha empleado vuestra inversión, así como la ayuda que le supone en su día a día.
Pero lo más importante de todo para saber que vuestra ayuda ha llegado es comprobar ¡que los fondos prestados vuelven a vosotros! Parece razonable pensar que, si alguien os va a devolver un dinero, es porque previamente ese dinero le ha llegado a esa persona ¿no? Pero vuestro dinero no solo vuelve, sino que lo hace con un interés del 8%, por lo que los mismos fondos que han ayudado a una mujer en un país desfavorecido, pueden volver ayudar a otras mujeres, toda vez que no han sido donados, sino prestados para proporcionar una ayuda financiera que nadie más les da.
Queremos desde este blog animaros no sólo a donar fondos a vuestra ONG favorita (sabiendo las limitaciones de información que podéis encontrar en el transcurso de dicha donación), sino también a invertir en mujeres desfavorecidas de Nicaragua mediante un producto que no sólo ayuda puntualmente, también genera riqueza para estas mujeres.
Porque tu inversión es su cambio. ¿Te unes?